Dialoguemos y promovamos el cambio: mi experiencia participando en Diálogos Informados RedLEI-Guatemala

Maribel Aguirre Chacón – coordinadora de carreras de educación en diversas especialidades en la Facultad de Educación de la Universidad del Valle de Guatemala

 

Muchos son los discursos que argumentan de manera efectiva las ventajas que tiene saber leer y escribir, la diferencia que esto puede marcar la vida de una persona y la oportunidad latente de desarrollar al máximo su potencial.  

 

Sin embargo, pese a toda cantidad de estudios que respaldan estas afirmaciones, el panorama permanece inerte ante cambios necesarios que significarían mucho para el recorrido acelerado en la búsqueda de la meta “Que nadie se quede sin saber leer y escribir”.   

 

Guatemala enfrenta día a día este enorme desafío, bajo diversas banderas se intenta llegar a quienes, en turno, tienen el poder de gestionar procesos que abran oportunidades para que el aprendizaje de la lectoescritura llegue a todo lugar y con ello, aportar significativamente a reducir la brecha de la desigualdad.

 

Hace poco tiempo tuve la oportunidad de participar en un proceso de reflexión crítica y propositiva entre profesionales de la educación en Guatemala.  Teníamos en común la vocación docente, el amor por nuestra gente y la fuerte esperanza en que trabajando juntos se puede construir un claro camino que oriente al avance hacia el objetivo propuesto.  

 

El análisis y la lectura crítica de evidencia actualizada y contextualizada que genera conocimiento real sobre la situación del país en la Formación Inicial Docente (FID, 2019) fue la base para empezar el diálogo. Poco a poco la sinergia se dio, se contagia la emoción cuando el tema de interés es común y, sobre todo, vuelve la esperanza al verse rodeado de personas, que al igual que uno, creen firmemente que con esfuerzo y voluntad las cosas se pueden dar.

 

Dentro de un proceso guiado de reflexión continua y bajo diversas posturas y puntos de vista se logró determinar la problemática central y enfocada en ella se visualiza el objetivo a perseguir: “Contribuir en la transformación de la formación inicial de los docentes en el desarrollo de las competencias necesarias para la enseñanza y el aprendizaje de la lectoescritura”. 

 

¿Cómo? ¿Sobre qué ejes temáticos principales? ¿Sobre qué fundamento teórico? ¿A partir de cuáles experiencias previas? ¿Con qué aliados estratégicos?  Muchas interrogantes que promovieron el proceso de trabajo colegiado en equipos y que dieron como producto un plan de acción claro y preciso para desarrollar.  

 

Las líneas de acción incluyen desde la propuesta de un diseño curricular congruente que impacte en la formación y práctica docente efectiva, hasta el desarrollo de procesos de investigación que incidan en cambios pertinentes y basados en evidencia en las políticas educativas nacionales. La ruta está claramente trazada y lista para emprender el camino.

 

Valoro mucho el esfuerzo y la iniciativa de la Red para la Lectoescritura Inicial de Centroamérica y el Caribe (RedLEI).  Promover estos procesos no solo asegura la congruencia de las propuestas, sino el éxito en su implementación y sobre todo el logro del impacto deseado. Hago una invitación a continuar los esfuerzos de discusión y difusión a todas las personas con incidencia en el tema.